Picor en el ano | .

Una de las causas más comunes de picor anal en los niños en edad preescolar son los oxiuros. Otras causas pueden ser la irritación de la piel, las hemorroides o las infecciones por hongos. El picor irritante también puede seguir a la diarrea o ser simplemente el resultado de una mala higiene.

Algunas de estas causas pueden requerir la intervención de un médico, pero otras son fácilmente curables.

Una vez que el médico haya descartado todas las causas graves, puedes probar en casa algunos de los siguientes consejos para que tu hijo se sienta mejor.

Mantén la zona seca. Es importante mantener seco el culito de tu bebé. La humedad causa irritación y también crea las condiciones ideales para las enfermedades fúngicas.

Haz que tu bebé se cambie la ropa interior varias veces al día. Si el picor es persistente, cámbiale las bragas a menudo (tres o cuatro veces al día) y no permitas que se acueste con ellas.

Usa polvo. El polvo puede ayudar a mantener seca la zona del ano. Cuando te apliques los polvos, asegúrate de agitarlos en la palma de la mano y luego espolvorearlos en el trasero. No lo espolvorees por todas partes porque puede tener un efecto irritante si se inhala.

Es necesario llevar al niño a un médico para que lo diagnostique si el picor del ano se acompaña de pérdida de peso, disminución del apetito o alteraciones intestinales persistentes. Pueden ser síntomas de un problema más grave.

También hay que consultar a un médico si hay una erupción sangrante y empapada o síntomas de infección, como fiebre o náuseas.

Los oxiuros, las infecciones por hongos o las hemorroides también son causas de picor en el ano que pueden requerir la atención de un médico. Tu médico puede recetar un medicamento que reduzca el picor y acelere la recuperación de tu hijo.

Busca siempre la limpieza. El picor puede deberse a que tu hijo no se limpia correctamente. Así que enseña a tu hijo a hacerlo correctamente.

El papel higiénico seco no permite asegurar que la zona del ano esté perfectamente limpia. Pero algunos niños pueden aprender fácilmente a limpiarse con papel higiénico húmedo.

Enséñale a mojar el papel higiénico y a utilizarlo después de cada defecación. Es conveniente lavarse después de defecar. O ten un suministro de papel humedecido cerca del inodoro para que tu hijo pueda utilizarlo. Termina con papel higiénico seco.

Prepara alimentos ricos en fibra. Las hemorroides rara vez son una causa de picor del ano en los niños. Pero si a tu hijo le han diagnosticado esta enfermedad, ha llegado el momento de cambiar su forma de comer.

Asegúrate de que tu hijo come más alimentos ricos en fibra, como verduras, fruta y cereales integrales, y reduce el consumo de alimentos pobres en fibra, como pasteles, dulces, galletas y patatas fritas.

Los alimentos pobres en fibra pueden provocar estreñimiento. Cuando un niño que sufre de estreñimiento se esfuerza al defecar, esto puede provocar hemorroides o empeorar el curso de una ya existente.

Al aumentar la ingesta de fibra, también es importante asegurarse de que el niño bebe más agua y come más fruta y verdura.

Haz baños de asiento. Vierte cinco centímetros de agua tibia en una bañera, disuelve en ella tres o cuatro cucharadas de bicarbonato de sodio y deja que tu bebé se siente allí durante quince minutos. Un baño sentado es muy calmante para los picores en el trasero, sea cual sea la causa.

Añade la harina de avena al baño de asiento. Para un mayor alivio, prueba a añadir una bolsa de harina de avena finamente molida al baño de asiento de tu hijo. Esto es especialmente relajante y tranquilizador.

Suaviza con algo relajante. El gel Itch-X se vende sin receta médica y es un calmante del picor. Aunque está destinado principalmente a tratar las picaduras de insectos, también puede ser útil para el picor del ano.

El gel está destinado únicamente a un uso externo. Los pediatras aconsejan – utilizar también vaselina o pomadas de venta libre, como Desitin, para cubrir y proteger la zona del picor.

Busca restos de jabón de lavandería. Los restos de jabón de lavandería en la ropa de tu hijo a veces pueden provocar picores. Para eliminar los restos de jabón de lavandería, aclara también la ropa de tu hijo.

Deshazte de la suavidad. Algunos niños también son sensibles a los suavizantes. Si los has estado utilizando en el lavado, deja de utilizarlos temporalmente y comprueba si el picor disminuye.